Letitia James, fiscal general de Nueva York, denunció al magnate por entradas falsas en registros comerciales, falsificación de estados financieros y fraude de seguros.
Según lo apuntado este viernes por Letitia James, la fiscal general de Nueva York, el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, exageró su patrimonio neto y lo hinchó en 3.600 millones de dólares anuales.
La acusación, propuesta por la oficina de la funcionaria, se centra en que el actual candidato a las primarias republicanas supuestamente hizo entradas falsas en registros comerciales, falsificó estados financieros y cometió fraude de seguros.
En base a un análisis realizado por expertos en valoración y contabilidad, la fiscal general alegó que el patrimonio neto de Trump en los años transcurridos entre 2011 y 2021 fue inflado entre 1.900 y 3.600 millones de dólares, dependiendo del año.
De todas maneras, James señaló que esa es «todavía una estimación conservadora», ya que el estudio aún aceptaba muchas de las suposiciones utilizadas por los acusados en sus estados financieros anuales.
La fiscal demandó al exmandatario y sus coacusados, entre los que se encuentran varios de sus hijos, por supuestamente defraudar a bancos, compañías de seguros y otros para beneficiar a la Organización Trump. Ante este contexto, pide una sanción de 250 millones de dólares por daños y perjuicios.
Paralelamente, el magnate de 77 años enfrenta 13 cargos por delitos graves, entre los cuales se destacan diversas causas judiciales abiertas por temas económicos, de seguridad nacional y políticos.
Donald Trump se declaró no culpable en el caso de Georgia
El jueves pasado, el expresidente estadounidense se declaró no culpable de la acusación de haber liderado una conspiración criminal para anular su derrota electoral en el estado sureño de Georgia, en 2020.
El candidato favorito entre los republicanos presentó su declaración en un documento judicial renunciando a su derecho a comparecer en una lectura de cargos programada para este miércoles.
Trump, quien se entregó en la cárcel del condado de Fulton (Atlanta) y se convirtió en el primer exmandatario estadounidense fotografiado en una ficha policial, fue puesto en libertad tras pagar una fianza de 200 mil dólares, en el marco de la acusasión en su contra de confabularse con otras 18 personas para intentar revertir su derrota en Georgia ante el actual mandatario, Joe Biden.
