Avellaneda:Aníbal Fernández experimentó la «sensación de inseguridad» al ser asaltado

Aníbal-Fernández-OJOFue abordado en Gerli por cuatro delincuentes que lo sorprendieron sin custodia y le robaron su vehículo. El legislador llamó al 911 desde una estación de servicio y volvió a su casa en remis. Justo cuando desde distintos medios se publican reclamos de los vecinos por la inseguridad y el intendente Jorge Ferraresi delega todo en su Secretario de Gobierno y Seguridad Pablo Vera.

El senador Aníbal Fernández fue asaltado anoche por un grupo de malvivientes que le sustrajo su vehículo marca BMW en la localidad bonaerense de Gerli, partido de Avellaneda.
El legislador circulaba sin custodia por la avenida Yrigoyen y a la altura del cruce con la calle Brasil fue interceptado por otro automóvil que le cortó el paso; en ese rodado se movilizaban cuatro hombres que, tras intimidar con armas de fuego al funcionario kirchnerista, se llevaron el coche de origen alemán.
Una vez consumado el robo, Fernández caminó hacia una estación de servicio cercana al lugar donde se produjo el asalto y dio la alerta al 911; luego pidió un remis y se dirigió a su domicilio.
Fuentes policiales detallaron que alrededor de las 23:30 el personal de la Comisaria 16 de la Policía Federal encontró el auto del senador abandonado en el barrio de Constitución.
El BMW estaba detenido sobre la calle Tacuarí 1167 y se encontraba cerrado, sin ocupantes en su interior y con el motor encendido, precisaron los mismos informantes.

La noticia reflotó una polémica afirmación del propio ex jefe de Gabinete, quien en 2006 consideró que la inseguridad era «una sensación» que se encontraba instalada «en la cabeza del hombre y de la mujer«. El mismo dirigente kirchnerista apuntó dos años después que eso era producto del «repiqueteo de los canales» de televisión que «hacen creer que un mismo hecho pasó tres veces«.

Antecedentes

Esta no es la primera vez que el nombre del senador del Frente para la Victoria aparece asociado a un episodio de inseguridad: fueron varios los casos que involucraron a hombres vinculados a su custodia.

En 2008, un grupo de delincuentes robó el auto oficial asignado por la Policía Federal para la protección del funcionario nacional, que en ese momento ocupaba el cargo de ministro de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos.

En 2010, el cabo Javier Lozano, de 34 años, que se desempeñaba en la Policía Federal y formaba parte de la división de custodias de Fernández (entonces Jefe de Gabinete) fue asesinado de cinco balazos cuando intentó evitar un asalto a una pizzería de Villa Madero.

En 2013, en Quilmes, otro hombre encargado de la seguridad del dirigente kirchnerista fue protagonista de un hecho policial al balear a un delincuente y evitar el robo a un comercio.

Inseguridad en Avellaneda

Como mencionábamos el comienzo de la nota son muchos los reclamos de los vecinos de Avellaneda, por la ola de inseguridad que aqueja al partido y que tiene como principales actores a motochorros, que armados y en grupos de dos o cuatro motos con dos ocupantes se dedican a asaltar a los vecinos sin que las autoridades hagan alfo efectivo al respecto.

Las quejas principales apuntan al intendente Jorge Ferraresi, quien esta semana pasada recibió de la gobernación de Buenos Aires 10 móviles y el ministro de seguridad bonaerense Granados dejó bien en claro que el responsable de la seguridad del partido es el intendente, curiosamente ante una consulta del diario La Nación por reiteradas denuncias de vecinos, el propio intendente se excusó en que el responsable de la seguridad es el Secretario de Gobierno y Seguridad Pablo Vera, un funcionario que está sospechado de brindar protección a ineficientes y corruptos funcionarios de distintas direcciones dependientes de su secretaría, el cual ante los llamados de la prensa se excusó con su secretaria advirtiendo que por el momento no iba a dar declaraciones.

El paso del intendente por el programa de TN «A dos voces» dejó una mala sensación en los vecinos y molestó al propio seno del kirchnerismo por la liviandad de los comentarios de Ferraresi y la forma en que el intendente de San Isidro Posse le remarcó todo lo que no se había hecho en seguridad, destacando la falta de interés en algunos intendentes de hacer las cosas bien, sabiendo administrar los recursos, también derribó con sólidos argumentos los dichos de que con una policía comunal las cosas iban a mejorar.

Mientras tanto, Ferraresi sigue haciendo agua en los temas de seguridad, las redes sociales a diario relatan en primera persona las experiencias de los vecinos como víctimas de delitos, y nadie se hace cargo desde el municipio comenzando por el intendente Jorge Ferraresi, que por terco, por su propia soberbia de no saber escuchar, mantiene a funcionarios inútiles y corruptos, perjudicando a los vecinos y buscando excusas que ya no satisfacen a nadie.

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