Un vecino de Lanús, Pablo padeció el cuarto robo en cuarenta días luego de que cinco ladrones que caminaban por la calle Urquiza, lo observaran descender del vehículo y lo atacaron a traición para arrebatarle las llaves.
Los sujetos se le aproximaron a la carrera, lo rodearon y a pesar que no se resistió, lo golpearon en la cabeza, lo amenazaran con una arma de fuego y revisaran en sus bolsillos.
Cuando, ya despojado, intentó escapar, le hicieron una zancadilla que ocasionó que cayera al piso mientras los ladrones escaparon con el Peugeot 208 robado que horas después fue encontrado en la localidad lomense de Ingeniero Budge, donde lo abandonaron para que se “enfríe”.
Mientras los vecinos ya no saben cómo reclamar seguridad, el intendente Julián Álvarez, sigue gastando millones en publicidad en redes sociales, mostrando murales o puesta en valor de espacios verdes, que al final los vecinos no pueden disfrutarlos por la inseguridad.