El fiscal federal Carlos Stornelli dispuso que continúe la investigación por la difusión de audios atribuidos a Karina Milei, pero aclaró que no se podrá indagar en las fuentes periodísticas ni vulnerar la inviolabilidad de sus domicilios.
El fiscal federal Carlos Stornelli resolvió este martes avanzar con la investigación por presunto espionaje ilegal en torno a las escuchas atribuidas a la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei. Sin embargo, dejó en claro que la pesquisa “no podrá hurgar en las fuentes de algún periodista, merezca el concepto que merezca por parte de quien lo analice, por mandato constitucional”.
En ese sentido, Stornelli sostuvo que el resguardo a los periodistas incluye también la inviolabilidad del domicilio, salvo orden fundada de un juez competente. “Debo decir que en la investigación no podrá hurgar en las fuentes de algún periodista (…) sin perjuicio de que alguno quiera voluntariamente aportar datos que considere puedan servir al descubrimiento de la verdad”, señaló.
El fiscal agregó que, si bien en la denuncia se mencionan algunas personas, será “el devenir de la investigación” lo que determine si existió un delito y quiénes serían sus eventuales autores, cómplices o encubridores.
La decisión de Stornelli se conoció tras la denuncia que el Gobierno presentó ayer ante la Justicia Federal, donde calificó la difusión de los audios como una “operación de inteligencia ilegal”. En paralelo, un juez del fuero Civil y Comercial había ordenado el “cese inmediato” de la publicación de ese material.
Stornelli puntualizó que la investigación deberá abarcar el período desde el que puedan datarse las primeras grabaciones publicadas, incluyendo los “actos preparatorios” de esa maniobra. Por eso, ordenó disponer las medidas de prueba requeridas y avanzar con la instrucción de la causa.