La sala 1 de la Cámara de casación le otorgó la prisión domiciliaria al represor Miguel Etchecolatz, pero seguirá en cárcel común debido a otras dos causas en las que se encuentra implicado. La Abogada querellante en el juicio que condenó a Etchecolatz, Guadalupe Godoy, dijo que de continuar los fallos, la domiciliaria “es una cuestión de tiempo”.
El responsable de la desaparición de un grupo de adolescentes en la denominada “Noche de los lápices” durante la dictadura militar, así como uno de los identificados por Julio López en el juicio que lo condenó, seguirá preso en una cárcel común, aunque ya son dos los fallos de la justicia que le otorgan la prisión domiciliaria.
Luego de que en agosto pasado el ex represor estuviera cerca de irse a su casa, la justicia determinó que seguiría cumpliendo la condena efectiva debido a otras causas a la que se le declaró culpable. Sin embargo, hoy la sala 1 de la Cámara de casación volvió a emitir un fallo similar.
“No se va a su casa porque todavía queda pendiente dos causas. Él está siendo juzgado por su actuación, pero las causas están separadas, la resolución que toma la casación es por una de sus causas”, explicó la abogada Godoy.
A su vez, la abogada que ofició de querella en el juicio que condenó al ex represor, se mostró preocupada al declarar que “la situación se repite. Ya está claro que con todo el poder judicial tomando similares medidas, esto es solo cuestión de tiempo”.
“El año pasado lo empezamos a decir que estaba claro, que a partir del cambio de gobierno, el poder judicial es muy permeable al cambio político”, dijo en diálogo para una radio.
Godoy indicó que el fallo es una “aceptación de la estrategia de los represores para que los juicios continúen en sus casas” ante la imposibilidad de una amnistía política.
“El fallo que la corte sacó hace dos semanas establece parámetros en los que prácticamente entran todos los represores que estén en situaciones parecidas”, alertó Godoy.
Finalmente, Godoy, quien también ha sido una activida militante en el pedido de aparición y justicia por el caso Julio López, enfatizó en que “el poder judicial no hace estas cosas casualmente. Está claro que es la recepción de un mensaje político”.
