La pedagoga Silvina Gvirtz, nominada por el gobernador bonaerense Daniel Scioli para ocupar la cartera educativa provincial, afirmó que apuntará a instalar el boletín digital para agilizar tareas de directores de escuelas, aumentar los establecimientos de enseñanza con doble jornada y lograr que los maestros «ganen lo más posible».
Gvirtz, quien es hermana del productor televisivo Diego Gvirtz y trabaja desde hace un año y medio con el director General de Educación bonaerense y candidato a diputado Mario Oporto, adelantó que «continuará y profundizará la actual gestión, con la construcción de más escuelas secundarias y salas de 3 y 4 años para universalizar la oferta».
«Hay que construir escuelas secundarias para garantizar la obligatoriedad que hoy tiene este nivel y trabajar para llevar un 10 por ciento de escuelas vulnerables primarias y medias a la jornada completa», dijo la doctora en Educación y gerenta de Inclusión Digital del programa Conectar.Igualdad, de la Nación.
Consultada por las medidas para evitar la persistente deserción y repitencia en el nivel medio, entre otros puntos planteó «renovar el lugar de los preceptores en las escuelas, para que se conviertan en coordinadores pedagógicos, y que no sólo controlen la disciplina».
«Los preceptores pueden convertirse en coordinadores pedagógicos para tener un trabajo personalizado con los estudiantes secundarios y garantizar la retención», dijo Gvirtz y agregó que otro de los requisitos para que el estudiante se lleve la netbook que recibe en la escuela media será que «complete el nivel».
Siempre sobre su plan de «tecnificar» las aulas y las tareas didácticas, Gvirtz anunció que va a «requerir el acompañamiento de los docentes, para poner en marcha el programa de aulas digitales, y formar y capacitar a los maestros que puedan asumir desafíos tecnológicos que tenemos por delante, y que a partir de ellos aprendan contenidos».
También adelantó que apuntará a «tecnificar todos los procesos burocráticos de la Provincia, donde los directores ya no lleven papeles en mano» y además instará a «colaborar y simplificar las tareas a través del armado de un boletín digital».
«No me da miedo, tengo experiencia en cargos ejecutivos, como directora del programa Escuelas del Bicentenario, y gerenta de Conectar.Igualdad, del ministerio de Educación nacional, y algunas veces hacemos nuestros primeros pasos en algo», manifestó ante la pregunta qué significaba hacerse cargo del sistema educativo más grande del país.
Respecto a la evaluación a los docentes que va a encarar la Ciudad de Buenos Aires en octubre afirmó que «no alinea» con esas posiciones, ya que le parece «que no tiene sentido evaluar a un buen docente con lo que escribe en un papel».
«A veces el maestro es bueno en el papel y malo en el aula», sostuvo en diálogo con esta agencia y anticipó que en la Provincia revisará los resultados de los alumnos en las pruebas internacionales PISA, para «diseñar proyectos de mejora en donde tuvieron dificultades».
Gvirtz agregó que hace un año y medio «que estoy trabajando con Mario (Oporto), que tiene una extensa carrera pública y fue muy generoso conmigo, y me está dando una mano para que su salida sea prolija».
Respecto de si le generaba temor tratar con los sindicatos docentes más numerosos del país, la pedagoga sostuvo que «los gremios están con justicia y razón para defender los derechos de los trabajadores, para que los maestros ganen lo más posible».
Reiteró la habitual queja de los funcionarios respecto a que «la Provincia invierte el 38 por ciento del presupuesto en educación, y el 95 por ciento de esos recursos van a salarios docentes».
Y en cuanto a la posibilidad de enfrentar huelgas dijo «vamos a tratar de ofrecer al los maestros lo más posible, pero van a tener que tener sensatez y correlación con la Provincia».
