Los profesionales de la salud y el personal estatal que cumplen tareas en el Instituto Malbrán convocaron a un nuevo paro de actividades para el próximo viernes en demanda de diversas reivindicaciones.
A la protesta se sumarán los trabajadores del ANMAT y el CENARESO y consistirá en una huelga durante toda la jornada y el corte de la Avenida 9 de Julio y Moreno, sin interrupción del tránsito, aseguraron los dirigentes de ambos sindicatos.
Los trabajadores reclaman un aumento salarial, la convocatoria a concursos, la generación de vacantes y el cese de los contratos «precarizados» y de las intervenciones en el Malbrán.
Los dirigentes gremiales María Freire y Flavio Vergara explicaron que entre «el 60 y el 80 por ciento del personal cumple sus funciones con contratos precarizados o tercerizados».
Los sindicalistas ratificaron que están «en riesgo las funciones esenciales de la institución» y exigieron el pase a planta de los más de 1.000 «contratados-precarizados, el respeto a su antigüedad en el cargo y salarios acordes a la importancia de las tareas científico-sanitarias que realiza el personal».
También demandaron «el reconocimiento de las funciones sanitarias y el cese del desmantelamiento de los institutos de salud».
La del viernes será la huelga número 23 que realizarán los empleados desde que se originó el conflicto, en tanto los dirigentes ofrecerán una conferencia de prensa a las 7.30 frente a las puertas del Malbrán, en la Avenida Vélez Sársfield al 500.
Desde el mediodía marcharán hacia Moreno y la Avenida 9 de Julio para cortar la zona, señalaron los dirigentes gremiales.
Los sindicalistas explicaron que el personal del sector produce y controla vacunas, sueros antiofídicos y reactivos de diagnóstico; conduce la red de vigilancia de resistencia de antibióticos y controla el síndrome urémico hemolítico en hamburguesas.
También está al frente del control de la gripe y otros virus respiratorios; actúa ante la aparición de brotes de hantavirus, hepatitis y meningitis, entre otras patologías; es el referente nacional del Chagas; fiscaliza y controla la calidad de medicamentos y alimentos y rehabilita a pacientes drogadependientes, conteniendo a sus familias, explicaron.
«Entre otras cosas, los trabajadores protestan porque un técnico especializado y con cinco años de antigüedad percibe con el último aumento solo 2.950 pesos; desde 1992 no se realizan concursos y tammpoco se incorpora a personal estable», concluyeron.
