La noticia de que un alumno fue apuñalado por un compañero en una escuela del barrio porteño de Saavedra, en medio de una pelea que habría ocurrido dentro del aula, reavivó el problema de la violencia en los colegios.
En las escuelas de la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano, 7 de cada 10 alumnos sufre la violencia de alguna forma, como testigos de hechos o directamente por resultar victimizados. Esta tendencia derivó ayer en un caso dramático, con un joven de 15 años que fue apuñalado por un compañero en una escuela del barrio porteño de Saavedra en medio de una pelea que habría ocurrido dentro del aula.
Trascendió que el alumno, que tuvo que ser trasladado de urgencia al Hospital Pirovano, sufrió una herida cortante en la espalda que no afectó ninguno de sus órganos ni la columna vertebral. Según trascendió, el episodio ocurrió alrededor de las 10 en la Escuela 5 «Monseñor Enrique Angelelli», ubicada en Tronador 4134, de Saavedra.
Al parecer, la pelea ocurrió en el aula, en medio de una clase, cuando los dos chicos comenzaron a discutir y tras elevar el tono de voz, el atacante habría decidido sacar de su mochila un elemento cortante con el que le originó la lesión a su compañero.
El director general del SAME, Alberto Crescenti, confirmó en declaraciones a la prensa que «el menor fue atendido por una herida punzo-cortante en la región dorsal derecha y fue trasladado al hospital Pirovano». Acerca de la problemática de la violencia en las escuelas del Area Metropolitana de Buenos Aires, realizado por UNICEF y FLACSO, se sabe que el 70,8% de los chicos tiene conocimiento de peleas con golpes entre alumnos en la escuela. Ese trabajo pudo determinar que el 66% tiene conocimiento de situaciones constantes de humillación, hostigamiento o ridiculización.
El 18% reconoce sufrir burla de manera habitual por alguna característica física. El 16,4% comentarios desagradables en público (con mayores proporciones en escuelas privadas). El 9,5 tratados de manera cruel (con mayor nivel en escuelas privadas). El 5% haber sido obligados a hacer algo contra su voluntad. El 3,1% declara haber sido tocados o tratados de tocar de manera sexual en contra de su voluntad de manera habitual o mas de una vez.
