Sandra Panizza pone toda la carne al asador

reunión-en-La-Plata-ministerio-de-salud   Hoy, en la ciudad de La Plata, quedó en evidencia que la dueña de la Clínica Nuestra Señora de la Dulce Espera, está jugando todas las fichas, primero en la semana, consiguieron pauta mediante, que el diario local La Ciudad, se ocupara de publicitar la adquisición de un tomógrafo aduciendo que era en beneficio de todos los vecinos, ya que va a funcionar las 24 hs. y como quien no quiere la cosa, además destaca el medio en un breve destacado, que la clínica volvió a enviar alimentos a un centro cultural y comedor, para vender una imagen distinta a la que tienen los vecinos que la detestan y todos coinciden en que no hizo la clínica siendo ética como médica.

El arribo minutos antes de las 16:00 hs, en que estaban convocados los padres y familiares a la reunión con el ministro de salud bonaerense del abogado Fernando Burlando, sorprendió a todos cuando supieron que él representa los intereses de la clínica.

Mucha agua ha corrido por la vida del abogado de la clínica, quien siempre ha sabido «vender» muy bien su producto. Es un abogado que lo supera su propio Yo, con muchísimos contactos políticos, con una excelente relación con los representantes del Poder Judicial y la policía, Burlando, es como se lo ve, un provocador. Afecto a los poses mediáticas y los discursos cargados de una oratoria de político en campaña, suele ser desmesurado y con los años se cuida mucho menos a la hora de calificar al resto de las personas.

Es un íntimo del gobernador Daniel Scioli, por lo que la imparcialidad del ministro de salud, será algo que tendrá que demostrar con hechos más que con palabras, tan íntimo que solía pasar varios fines de semana en la quinta «La Ñata» y compartir algunos partidos de fútbol con el hombre fuerte en la provincia de Buenos Aires. Su aparición en escena para defender la clínica no ha sido tal vez la mejor opción, ya que lejos de intimidar, a los que reclaman, los llena de valor y determinación, sabiendo que ahora tendrán que dar lo mejor de sí.

También alimenta las intrigas, ya que no solo se habla de mala praxis, cuando se habla de la clínica, sino que se mencionan otras hipótesis diferentes, pero todas vinculadas con ilícitos graves. Lo primero que hoy se preguntan muchos es ¿ quién le paga Burlando a la clínica?, y la amenaza que alguien sin escrúpulos me profiriera hace unos días, ahora comienza a tener otro color cuando me aseguró «Vos no sabés con la gente que te estás metiendo, te lo digo por tu bien, hay mucha gente muy pesada detrás de esto».

Un rápido análisis nos lleva a otros casos resonantes en los que participó, y que en su momento sirvieron para descomprimir situaciones criticas en donde se mezclaban, la actuación policial, la política, la droga y los políticos, tal vez el más reciente, el caso Candela.

En la reunión de hoy quedó en evidencia cuál es la estrategia del abogado, «entregar» a los médicos, incluido el director de la clínica y dejar a salvo a Sandra Panizza.

Espero equivocarme, pero sentí que el propio ministro apoyaba esta teoría con comentarios al pasar vinculando los hechos a actos médicos, lo cual es correcto, pero cuando existe una metodología sistemática de practicar cesáreas innecesarias, generando además más bebés prematuros, para tener que internarlos y aumentar la facturación, la responsabilidad de la dueña de la clínica no puede quedar a un costado.

Si bien el ministro demostró interés y compromiso para con las familias, no menos cierto es que no es serio decir que no tenían denuncias anteriores, cuando todos los que alguna vez presentamos una queja o denuncia, sabemos que no nos recibe el ministro sin una audiencia previa, entonces reitero es difícil creer en la objetividad.

Como denunció la abogada de algunos padres Clarisa, existen varios focos de corrupción y complicidad con la clínica, que todos esperan no se repita.

La concejal Verónica Juárez, quien viene acompañando en soledad a los familiares, ya que nos consta otros concejales, se encuentran con intereses encontrados con la clínica, por trabajo, por familiares, le solicitó al ministro Collia que no deje solos a los padres, que agradecía el gesto del gobernador Daniel Scioli y la posibilidad de reunirse con los familiares, también le pidió al abogado Fernando Burlando que recapacite sobre su participación en favor de la clínica, ya que no necesita ni el dinero ni la mala prensa que indudablemente da representar a quienes tienen tantas denuncias de alta sensibilidad, los familiares con mucho respeto le pidieron a Burlando que mire las fotos y escuche sus relatos.

Desde el Multimedios El Sindical, comenzamos con las mamás y los papás y terminaremos con ellos, este reclamo de justicia, porque a diferencia de otros profesionales, que dicen que no les interesa el dinero, pero están del lado del poderoso, del que tiene influencias, mientras que nosotros compartimos el dolor y el pedido de justicia, es obvio que la lucha es desigual, que incluso algunos tenemos más para perder que para ganar en una sociedad corrupta, donde los corruptos hacen causa común. Pero tenemos dignidad, alguien contaba que hay que honrar la vida, y es lo que queremos hacer, erguirnos y honrar la vida, ser la voz de los que ya no están, llevarles algo de paz a muchas familias.

Una actitud que destacamos por ponerse del lado de las familias, fue la del intendente Jorge Ferraresi, a quien hemos criticado en muchas de sus decisiones, pero en esta oportunidad, demostró su compromiso para que se investigue la clínica, poniendo el medio de transporte para que las familias se trasladen al ministerio de salud.

La llegada de Burlando es la clara señal de que se está en el camino correcto, y que algo más hay detrás de las muertes de los bebés, no creo en casualidades con gente como Panizza, justamente una ex empleada declaró bajo juramento en sede judicial las relaciones de la dueña de la clínica con importantes dirigentes sindicales.

Al parecer, Sandra Panizza debe ser protegida, o su caída puede provocar un efecto domino que a muchos desvela, mientras los reclamos siguen y las denuncias aumentan.

 

Por Marcelo Ricardo Hawrylciw

 

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