Algo en el Sanatorio de Bernal no huele bien, y es literal, a las denuncias por mala praxis reiteradas, al estar en el lugar, pudimos comprobar que desde el sanatorio, se arrojan fluidos a la vía pública, más precisamente a la Av. San Martín y se concentran estos líquidos en su intersección con Avellaneda, el olor es nauseabundo, ¿arrojan materia fecal a la vía pública?. Barba Gutiérrez ¿y los controles?.
Los familiares de víctimas de lo que se denuncia como casos de mala praxis en el Sanatorio Bernal, ubicado en la localidad homónima, partido de Quilmes, volvieron a reunirse pasadas las 19:00 hs, para reclamar y hacer visible con un corte de calle, el pedido de justicia y memoria por las víctimas.
Son cientos los casos documentados y casi unos cincuenta los judicializados, pero se sabe que son muchos más, ya que hay gente que no puede o no sabe como iniciar una demanda judicial y no cuentan con el dinero para pagar un abogado o el tiempo para gestionar una gratuito por todos los requisitos que se le imponen.
Este tipo de reclamos por justicia siempre son desparejos, por un lado los dueños de la clínica o sanatorio, con su dinero, contactos e influencias, por el otro, familias de clase media a baja, con la necesidad de trabajar, de tener que hacer un sacrificio incluso para reclamar justicia, y los que pueden pagar un abogado, luchas judicialmente siempre en desventaja.
Los políticos, que deberían controlar estos establecimientos, que deberían equiparar “fuerzas”, suelen estar comprometidos con los empresarios de la salud, una administración como la de Daniel Scioli, no solo permite que estos lugares funcionen, sino que además no los controlan.
La gestión en salud del ministro Alejandro Collia es ineficiente, con lo cual el mismo ministro termina siendo un inoperante. El sistema de salud provincial hace años que está en crisis, nada se ha mejorado con algunas obras, algunos equipos y la instalación de las UPA. Tampoco el ministro de salud a podido tener una buena relación con los gremios, porque no ha sabido ofertar nada tampoco, muertes, solo eso ha dejado la no gestión.
Por si fuera poco, se le ha permitido a reconocidos abogados “presionar” a las familias, denunciarlos, amedrentarlos con cartas documento, manipular a los medios e incluso jactarse como lo hizo el mediático y pomposo Burlando decir “soy amigo del ministro Collia, pero más amigo de Scioli”.
La unión de los familiares de Bernal, representa el mismo dolor y pedido de justicia que el resto de los familiares de víctimas de clínica y sanatorios que funcionan como empresas, donde solo importa la facturación.
Como sociedad no podemos estar ajenos a estos reclamos, sean en Avellaneda, Bernal, Quilmes o el partido que sea, estamos hablando de vidas humanas.
Por Marcelo Ricardo Hawrylciw
Si no es Sarandi es Moron o en este caso Bernal. En unos meses será otro lado, pero permanentemente la Provincia de Buenos Aires viene teniendo denuncias de este tipo y ya lo vivimos con la Clínica de la Dulce Espera de Sarandi. Ya lo imagino al Ministro Collia deslindar sus responsabilidades. Ya lo vivimos señores y nada ha cambiado. Si no han podido modificar algo en este tiempo supongo que será por inoperantes, por desidia o corrupción, me juego por las tres juntas. Funcionarios y políticos tomen cartas en el asunto, aunque sea háganlo pensando que hay elecciones y que esto les puede dar un beneficio personal pero háganse cargo aunque esa no sea la forma. Entiendo que muchos de ellos están prendidos pero una vez que sea a favor de las víctimas y familiares. El desinterés por la vida es increíble por parte del Ministro Collia y sus funcionarios ya van a hacer inspecciones y le van a cambiar la cara al sanatorio como hicieron en Sarandi y solo fue maquillaje. Funcionarios, políticos y ministros no sean cobardes y hagan lo que corresponde, rompan ese molde corrupto con el cuál se manejan.