Norberto Fernández, de 54 años, abusó sexualmente de una joven de 19 en 2013. Había estado prófugo un año.
El Tribunal Oral en lo Criminal N° 2 de San Isidro encontró culpable al remisero Norberto Fernández, de 54 años, de abusar sexualmente de una joven en 2013 y lo condenó a 13 años de prisión. El acusado, que había estado prófugo durante un año, se entregó luego de que se difundieran fotos de su cara en los medios de comunicación.
María, la víctima, se mostró conforme con la condena y dijo: «Mi vida es hermosa más allá de esto. Le digo a Manuela (la chica violada meses atrás por un taxista a la salida de un boliche en la Ciudad) que no baje los brazos, que un día lo vamos a encontrar al culpable y hacer justicia». Con esto, «transformé el odio en amor», contó, aunque confesó que «el cuerpo tiene memoria y que hay que hacer un duelo y sacar todo eso».
El acusado, que estuvo prófugo un año, se entregó a la Policía luego de que el caso se hiciera mediático. No obstante, intentó convencer al tribunal de que había sido sexo consentido y no una violación como acusaba la joven.
«Él dijo que mantuvo sexo consentido y contó que esa noche luego de dejar a un cliente siguió por la calle, encontró a mi defendida, bajó la ventanilla del auto, le dijo un piropo y que era muy linda. Y que luego de una cuadra de decirle piropos, ella se subió al auto y mantuvieron relaciones consentidas durante 10 minutos», dijo la defensa en su momento.
«Los jueces le hicieron caso a lo que pide la gente. A veces cuando las víctimas no están acompañadas, el Poder Judicial hace lo que quiere. Estoy sorprendida todavía. Feliz. Me hubiese gustado la pena máxima, pero le dieron más años de los que pidió el fiscal y eso es histórico. El duelo personal todavía no lo empecé a hacer porque había una causa. Ahora después de tanta lucha, puedo empezar mi duelo personal. Este es un primer triunfo, pero ahora hay que enfrentar a Casación que ha absuelto a muchos violadores», sostuvo la víctima tras la condena.
