El escalofriante hecho se produjo en el barrio salteño de San Benito. Un hombre, que aparentemente habría discutido con su mujer, mató a la bebé mientras tomaba la mamadera. Luego, se colgó de un tirante del techo de la casa.
Un hombre al que identificaron como Marcelo, asesinó a su pequeña hija de un año y siete meses. La degolló cuando tomaba la mamadera, y luego se ahorcó dentro de una vivienda situada en el barrio San Benito de la ciudad de Salta.
La madre de la criatura Natalia Salva pidió ayuda a los vecinos y estos llamaron al 911. El hecho ocurrió cerca de las 12.40. Luego llegó la policía y el Samec, informó el sitio eltribuno.info.
De acuerdo a las primeras observaciones del médico legal la bebé presentaría una herida cortante a la altura de su cuello. Se pudo establecer que, luego de cometer el crimen, el sujeto se colgó de un tirante en el techo de la vivienda.
La tragedia se desencadenó luego de que se escucharan gritos en el lugar. El hombre encerró a su mujer y luego se escucharon llantos de la bebé, hasta que todo quedó en silencio.
Según los vecinos, en ese lapso de tiempo, llamaron al 911, pero la demora obligó a la gente a abrir la puerta por sus propios medios y hallar el macabro escenario, con la nena degollada y, muy cerca de allí, el cuerpo de su padre.
Tras la llega del 911, arribaron al lugar de la tragedia los técnicos del Cuerpo de Investigadores Fiscales.
Una vecina, Susana, expresó: “La chica suplicaba y la gente del barrio intentaba ayudarla a entrar a la casa. Los vecinos llamaron al 911 pero tardaron mucho tiempo en venir. Yo me acerqué y vi a la chiquita degollada sobre la cama. El se había ahorcado. Llamé al 911, me respondieron que ya iban a mandar el móvil pero transcurrían los minutos y no venían. En total me comuniqué cuatro veces y no pasaba nada. «No hay móvil, me decían, o repetían: «Ya va a ir’. Yo estoy indignada con el 911. ¿Qué esperaban para venir? ¿Que alguien mate?, eso fue lo que sucedió. Ahora hay mucha policía, pero ¿de qué sirve? Ya pasó todo. Se perdió la vida de una criatura y el dolor de su madre será irremediable”.
“La comisaría 10 está cerca, no entiendo por qué no mandaron el móvil rápido”, manifestó, con gran enojo, Mónica Chauque, la vecina que auxilió a Natalia Salva.
“Una vez que la Policía llegó quiso acaparar y corrernos a todos. ¿Recién llegan? Miren lo que pasó, les dije a la Policía”, aseguró María Chauque, hermana de Mónica y quien también auxilió a la joven. Unos 100 vecinos salieron a la calle y contemplaron la triste escena. Una vez que personal de Bomberos retiró los cuerpos, Mónica Chauque exclamó: “Aplausos para el 911 porque si hubieran llegado antes, esto no hubiera pasado”, tras lo cual todos los residentes aplaudieron y la mayoría estalló en llanto.
