Rubén García, ya bastante mayor para seguir llamándolo «Cholito» y Daniel Ferro, vuelven a mostrar una vez más que ante la falta de argumentos todo viene bien para figurar en algún medio con pauta y que les sirva para sus propios intereses, algo que ambos vienen haciendo hace muchos años y les permite llevar vida de ricos.
Si realmente los trabajadores municipales votaran por representantes sindicales verdaderos seguramente estos personajes se deberían dedicar a disfrutar la que «ganaron» y nunca pudieron justificar, pero si existe una muestra contundente de la calidad de persona, esa es las declaraciones que ambos hicieron con respecto a la tragedia de la Escuela EE N° 49, que la costara la vida a la vicedirectora Sandra Calamano y al auxiliar Rubén Rodríguez, mientras todas las criticas efectuadas apuntaban a una responsabilidad de la gobernación, los dos carroñeros, eligieron usar ese hecho para criticar al intendente de Avellaneda Jorge Ferraresi, tirando un salvavidas mediático a María Eugenia Vidal.
Durante muchos años, Ferraresi y estos impresentables del sindicalismo disfrutaron de acuerdos y beneficios, no había reclamos por mejoras para los trabajadores municipales y la prioridad de ambos era construir una estructura mayor dentro del sindicalismo, lo que garantiza no solo poder, sino sustento económico, así se llega al absurdo de que algunos seudo defensores de los trabajadores sean dirigentes en un sindicato, federación, obra social y hasta consejos, la suma de cargos es también la suma de viajes, de viáticos y de sueldos, todo suma.
La verdadera pelea de estos personajes disfrazados de representantes sindicales, que no tienen idea de lo que pasa el trabajador en ninguno de los sentidos, ni en lo económico donde a ningún trabajador municipal le alcanzaría el sueldo para viajar todos los fines de semana a Mar del Plata con el gasto que ello implica tal como lo hace Ferro, ni vivir una cómoda vida de lujos como García.
Alguna vez, estaría bueno que estos dos, más Hernán Doval que lo tienen como siempre un poco tapado para que no meta la pata, expliquen sus patrimonios, pero principalmente expliquen y rindan cuentas del manejo del STMA por ejemplo, donde algunos dirigentes que hasta hace un par de años se movían con la SUBE y ahora se toman vacaciones en el exterior a pesar del precio del dólar.
Por Marcelo Ricardo Hawrylciw
