La automotriz dispuso el cese de sus 2.000 operarios este jueves y los dos próximos viernes, a causa de los efectos de la desaceleración económica de la región, que obligó a ajustar sus planes de producción.
Esta situación es consecuencia de la baja demanda de Brasil, que es el destino de casi la mitad de los automóviles que se fabrican en Córdoba.
La cámara empresaria aseguró, además, que las exportaciones de autos argentinos cayeron 45,7% respecto de mayo de 2011. En tanto, en los primeros cinco meses del año se exportó 26,5% menos, agregó.
En este marco, Renault oficializó en las últimas horas las suspensiones en su planta del barrio Santa Isabel de Córdoba.
Fuentes de la compañía informaron que se pondrá en marcha un plan de suspensiones que comenzará este jueves en el segundo turno, mientas que el de la mañana trabajará normalmente, y continuará el viernes durante toda la jornada. Lo mismo sucederá el viernes de la semana que viene, también para los dos turnos.
Además, están previstas suspensiones durante otros tres días, que se concretarán a fines de junio, aunque todavía no habían sido fijadas las fechas.
La empresa precisó que las suspensiones se llevarán a cabo para «regular el stock».
Los trabajadores, agregó, cobrarán el 75% de los salarios correspondientes a esas cinco jornadas y media.
Fuentes de Renault Argentina aseguraron que las suspensiones no implican la modificación de los planes que la compañía tenía previstos en Córdoba, informó el diario La Voz del Interior.
La terminal automotriz aseguró haber cumplido con más del 90% del anunciado plan de inversiones por 100 millones de dólares.
Ese plan incluyó cambios en la planta y el montaje de la línea de producción para un nuevo modelo que apuntará a ser masivo, ya que tendrá un precio menor que el Clío.
Renault aspira a sumar volumen con ese lanzamiento, que se producirá a fines de este año.
