Ramos Mejía:Se encadenó para reclamar pañales para su hijo que padece parálisis cerebral

Un docente se encuentra desde el mediodía atado a un poste de luz, en el frente de la sede de una obra social, para pedir que le brinden las prestaciones a su hijo. Su historia es sinónimo de desidia e inoperancia.

Cansado de no obtener respuesta, un maestro del colegio Mariano Acosta se encadenó frente de la sede de la obra social OSPLAD en Ramos Mejía en reclamo de prestaciones para su pequeño hijo de 4 años y medio, que padece parálisis cerebral.

El hombre, Ricardo Asado de 41 años, permanece desde este mediodía atado a un poste en San Martín 79 hasta tanto personal de la entidad le brinde alguna solución después de varios meses de haber presentado diferentes pedidos a las autoridades de la institución.

«A los tres meses de que mi hijo Máximo Emanuel nació, tuvo muerte súbita. Después de 45 minutos de reanimación lo volvieron a la vida, pero como consecuencia padece parálisis cerebral y le fue practicado una gastrostomía«, contó el hombre.

Por su problema de salud, el niño requiere de la utilización de al menos seis pañales diarios. Pero desde hace dos meses no recibe ninguno. «La obra social no aprueba más de 150 por mes, pero necesitamos 190 y este es el segundo mes que no nos dan ni uno«, expresó.

Asado contó que la última vez que los solicitó, le enviaron un mail en el que le decían que quien se encarga de traerlo «se olvida«. Pero no es la única respuesta indignante.

«Mi hijo necesita una enfermera todo el tiempo. Esperemos que no se enferme la que tiene porque no envían reemplazo. Recuerdo que una de las que me mandaron tenía una causa penal por sobremedicar a una paciente«, contó el docente.

El maestro reclamó además que OSPLAD no le envía una estimuladora temprana y que en reemplazo la prestación la brinda un kinesiólogo que no se especializa en este servicio.

UNA SOLUCIÓN TARDÍA

Pero el reclamo de Asado tuvo su pico cúlmine cuando solicitó una fonoaudióloga. «Desde junio que la estoy pidiendo. Primero presenté una órden. Después de 35 días me dijeron que faltaba un papel; cuando lo presento me dicen que la chica que se encargaba de esto estaba de licencia y que no sabían dónde estaba el expediente. Y luego me dijeron que la empleada estaba de vacaciones«, expresó indignado.

Recién hoy, con el hombre encadenado a la puerta, le solucionaron el problema, pero no le dieron ninguna respuesta para los demás reclamos. Incluso, la directora médica trató a su medida como «una payasada».

El docente había reclamado previamente en la Superintendencia de Salud, donde le dijeron que no tenían el poder para obligar a una obra social a cumplir; el INADI le contestó que no se ocupaba del tema y la Secretaría de discapacidad de Morón– de donde son oriundos- lo citó a una reunión pero no le dieron ninguna solución.

«Me hicieron ir a un encuentro de dos horas, y les conté todo el problema. Cuando me voy, me dieron una palmada en la espalda y me dijeron: ‘esperemos que todo se solucione’. O sea que nadie me brindó ni una respuesta«, afirmó.

Asado, quien formó un grupo en el Facebook llamado «OSPLAD…Hacete cargo de lo que te corresponde», aseguró que va a deponer su protesta cuando las autoridades de la obra social le den una solución para su hijo.

«Me voy a quedar a dormir acá y me quedaré todo el tiempo que sea necesario hasta que alguien me solucione esto», concluyó.

Por María Belén Gutierrez Sieiro

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