El horrendo caso tuvo lugar en la localidad bonerense de San Francisco Solano. Los nenes tenían 7 y 12 años y el homicida dejó una carta antes de cometer la barbarie.
“Quedate tranquila, no te voy a molestar más”, rezaba la carta que Julio Argüello dejó en el interior de su domicilio en San Francisco Solano momentos antes de degollar a sus dos pequeños hijos y suicidarse utilizando el mismo cuchillo. Su esposa y madre de los nenes, Patricia Putero, de quien estaba separado desde hace algunas semanas, se encontró con la terrible y sangrienta escena.
La mujer estalló en un grito desconsolado, con un dolor profundo que no se puede describir con palabras. El brutal episodio tuvo lugar en la vivienda ubicada en las calles 820 y 885 del barrio La Matera, en la mencionada localidad del partido de Quilmes.
Tras la separación, Argüello se encontraba deprimido, por lo que habría tomado la trágica decisión de acabar con su vida y la de sus hijos. Así fue como el sábado cuando llegaron los chicos para visitarlo, tal como habían acordado, tomó un cuchillo de la cocina y los degolló. Posteriormente se quitó la vida del mismo modo. Cerca de los cadáveres había una nota para su ex pareja. Los cuerpos fueron hallados por Patricia, quien acompañada por su hermano, ingresó a la casa el sábado poco antes de la medianoche.
Tendidos en el piso halló asesinados a sus dos hijos, Lisandro de 7 años y Leandro de 2.Tras realizar la denuncia policial en la comisaría 4ª, arribaron al lugar los uniformados que constataron el hecho y personal de la Policía Científica que realizó las pericias de rigor.
El Fiscal de la causa, Ariel Rivas, a cargo de la Unidad Funcional Nº 4 del departamento Judicial de Quilmes, también estuvo presente en la escena de los crímenes. El padre de los chicos antes de quitarse la vida dejó una carta dedicada a su ex esposa. En la breve misiva le explicaba a ella, entre otras cosas, que “ahora podés hacer lo que querés, ya no te voy a molestar más”.
Si bien los investigadores esperarán los resultados de la autopsia para determinar los pormenores del caso, consideran que todo se desató por una cuestión pasional que apunta al resentimiento y la bronca que Argüello tenía para con su ex mujer por haberlo abandonado.
Efectivos policiales intentaron interrogar el domingo a Putero, aunque a raíz del estado de shock en el que se encontraba no fue una tarea sencilla. El fiscal está al frente de la causa que cuenta con secreto de sumario. Fuentes policiales dijeron que los tres cadáveres presentaban heridas cortantes a la altura del cuello. Putero y Argüello se encontraban separados desde hacía varios días.
