Quilmes: Cobarde golpeó y torturó a su beba fue detenido sin oponer resistencia

Lucas-DogliottiLucas Dogliotti, padre de Mía, de 14 meses, declaró en el juzgado: «Yo no fui, no sé qué le pasó, yo no le hice nada». Permanece detenido por intento de homicidio. La beba se encuentra en el Hospital Garrahan «estable» y fuera de peligro.

La beba que el jueves fue introducida dentro de un lavarropas en funcionamiento supuestamente por su padre tras una pelea con su madre, en una casa de Quilmes, permanecía esta mañana internada en buen estado de salud en el Hospital Garrahan.

El hombre, declaró ante un juzgado y aseguró que «yo no fui. No tengo idea de lo que le pasó a Mía, pero sé que no le hice nada».

Una fuente de ese centro asistencial aseguró que la beba de un año y dos meses “está en compañía de su madre y permanece estable, en buen estado y en las próximas horas será llevada a una sala común”.

Las fuentes consultadas aseguraron que la vida de la beba no corre riesgos y que se le está brindando toda la asistencia tanto a la niña como a su madre.

Según publicaciones de familiares de la menor, aseguraban en los medios y las redes sociales que la nena fue prácticamente torturada por Lucas, quien pasó la noche arrojándole agua de la heladera, mientras la golpeaba y amenazaba, el momento culminante fue cuando introdujo a la beba en el lavarropas.

Según declaraciones del Jefe Departamental de Lanús Canosa, el detenido cuenta con antecedentes penales y cumplió varias condenas por robo, hoy nadie encontraba una explicación a los hechos ocurridos con su propia hija, y se especulaba que actuó bajo el efecto de las drogas.

Si bien el hecho ocurrió en Quilmes, su detención fue realizada por personal de la Comisaría 6ta de Avellaneda y una brigada de la DDI de Lomas de Zamora.

Más tarde el Fiscal del caso Alejandro Ruggeri, explicó que la causa está caratulada como “intento de homicidio”. Según la denuncia, Lucas Doglioti le pegó a la mujer y en ese momento se despertó la pequeña. “Estaba en un brote”, señaló el Fiscal, quien precisó que “introdujo en varias oportunidades” a la beba en el lavarropas.

Desmintió que el lavarropas estuviera en funcionamiento, pero sí tenía agua. La pequeña fue tomada de los tobillos y sumergida en el interior, varias veces.

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