El secretario de Gobierno y Seguridad, del municipio de Avellaneda, Pablo Vera, sigue escondido detrás de su escritorio para los medios que no son «aliados» por la pauta a la gestión, por eso, sigue sin responder a las criticas a la policía local, que no paran de cometer errores y hasta incumplir la Ley, pero se muestra distendido con los medios que lo cuidan y promocionan las mentiras de la gestión, mientras, los vecinos organizan reclamos en distintos barrios de Avellaneda.
La táctica del deficiente gobierno de Ferraresi ha cambiado, ahora los «punteros» no dicen en los barrios que está todo bien en materia de seguridad, sino que para «controlar» las protestas, asumen ellos las mismas, organizan encuentros en clubes, con funcionarios municipales y policiales, y «bicicletean» a los vecinos que creen estar participando de un reclamo genuino.
Es decir, siguen subestimando a los vecinos, organizar marchas para reclamar más seguridad a la policía, siempre es mejor que tener a los vecinos reclamando en el municipio, lo que algunos vecinos parecen no comprender, es que desde hace mucho tiempo, las decisiones en materia de seguridad pasan por los políticos y no por los policías que son removidos o trasladados según la conveniencia política, incluso algunos jefes policiales, a pesar de haber demostrado ser ineficientes para su trabajo policial son premiados con ascensos o nuevas designaciones, como por ejemplo el Jefe Departamental de Lanús – Avellaneda, Comisario Mayor García, o el desplazado y que Ferraresi por «favores» hechos reciclo para la policía local el Comisario Mayor Manuel Canosa.
Mientras siguen robando impunemente en algunos barrios, mientras se suman vecinos muertos, siguen zonas liberadas y personajes «intocables», barras o «matones» de ocasión que se los puede encontrar los días de cobro por el Palacio Municipal, el que tenga dudas, que vaya y lo vea por sí mismo.
Contra la policía
Lo que pretende la gestión Ferraresi y lo demuestran cada vez que pueden de forma soslayada porque ninguno de los funcionarios actuales hace las cosas de frente o las reconoce, están llevando adelante un desgaste de la imagen de la policía bonaerense, confundiendo cada vez que pueden a los vecinos.
Uno de los operadores que no pierde ocasión de desacreditar el trabajo de la policía, es el secretario de DDHH local Claudio Yacoy, quien tiene un concepto muy acotado de los DDHH, ya que suele no atender siquiera los reclamos genuinos de vecinos, pero sí gusta de la rosca política en casos que le permiten hacer política de la «barata».
Los comentarios de algunos «punteros» en los reclamos vecinales que apuntan a describir los «negocios» policiales, son para distraer el foco de atención y enojo de los vecinos ante los casos de inseguridad y que terminen puteando y marchando contra la policía. Esto no implica una defensa a la policía que tiene y mucho para criticar, pero uno no debe dejar arriar, por esto oportunistas.
Los millonarios gastos en seguridad, cámaras, móviles y demás insumos que pagamos todos por una mala administración municipal, la generan los políticos, no la policía, los mismos políticos que sostienen a jefes inútiles y corruptos.
Por eso es necesario no seguir sin comprender que son los políticos los que deben dar respuestas y soluciones, son los políticos los que se sienten seguros mientras dure el mandato.
Al intendente, a Pablo Vera, Mónica Ghirelli y el resto de ineficientes, no les preocupa nada que la gente marche o pida justicia en las comisarías, porque no los compromete, porque no se hacen cargo de la seguridad salvo para las fotos, así estamos, vecinos, empiecen a pensar, usted tiene que reclamar a quien corresponde.
Por Marcelo Ricardo Hawrylciw
