Este lunes por la tarde el mundo de la televisión, el arte culinario y la Iglesia se unen para sufrir la perdida de la Hermana Bernarda, quien murió luego de estar internada desde el miércoles 11 de junio por haber sufrido un ACV.
La monja se hizo conocida, y querida, por los programas de televisión en donde cocinaba. Sus restos serán velados en la capilla de su comunidad religiosa, en el partido de Quilmes, el martes, desde las 8 horas.
En abril de 2011 había salido la noticia de su muerte pero rapidamente fue desmentida ya que ella misma contó que estaba haciendo las compras en un supermercado. Este lunes el obispo Carlos Tissera fue quien lo confirmó a través de un comunicado en el que da «gracias a Dios por la vida fecundada». Su nombre era María Bernarda Seitz y pertenecía a la orden de las hermanas de la Santa Cruz, continuaba dando clases en la parroquia de los Dolores, Quilmes.
