La decisión de quitar la obra con el rostro del joven asesinado por un patovica de La Casona fue tomada por la Municipalidad. “Por la historia de trabajo conjunto que tenemos, mereceríamos una explicación”, dijo el padre del joven. “Me gustaría hablar con Díaz Pérez.”
El mural que en la vieja Municipalidad de Lanús recordaba a Martín Castellucci, el joven asesinado en 2006 por un patovica del boliche La Casona, fue demolido por disposición del Ejecutivo comunal con el argumento de que allí se instalaría un centro cultural.
El padre del joven, Oscar Castellucci, afirmó que la familia no fue consultada al respecto: “Por la historia de trabajo conjunto que tenemos, mereceríamos una explicación”, subrayó.
Castellucci contó a AUNO que frente a las múltiples propuestas de rehacer o reubicar el homenaje a su hijo, la única respuesta que tuvo de las autoridades fue: “Busquen otro lugar”. Hacia el final de 2013, el hombre se había enterado por rumores de que la comuna iba a construir un centro cultural en el viejo edificio municipal ubicado en 25 de Mayo 131, en cuyos jardines lucía el mural inaugurado en 2008, dos años después del asesinato que había ocurrido a solo una cuadra de allí.
Con la intención de proponer alternativas para trasladar la obra, la familia Castellucci contó que intentó dialogar con el intendente Darío Díaz Pérez, pero no solo no obtuvieron respuesta sino que, además, el nuevo centro cultural no se construyó pero comenzó a funcionar en el viejo edificio. “Lo que nos sorprende definitivamente es que mandamos a consultar si lo podíamos hacer de nuevo, incluso en otro lugar; una pared lindera o en la placita que está al lado. Pero la respuesta fue que busquemos otro lugar”, destacó Castellucci. Para el padre de Martín, la actitud de Díaz Pérez es “contradictoria”, porque, cuando se inauguró el mural, él y el intendente cortaron la cinta y se comprometieron a “luchar contra la impunidad y por la defensa de los pibes”.
“Por la historia de trabajo en conjunto que tenemos, creo que mereceríamos una explicación aunque la respuesta sea negativa”, subrayó. “Estamos esperando que nos llamen de algún lugar. Hemos sido largamente prudentes, esperamos que pase todo el mes de marzo, pero tampoco nos queríamos quedar en silencio respecto del hecho, porque si no difundíamos nada era como que estábamos de acuerdo en lo que había pasado, y la verdad es que no”, añadió.
Para la familia Castellucci, la ubicación del mural a escasos metros de donde fue asesinado tenía un gran valor simbólico y consideran que “no tendría ningún sentido” ni les interesa emplazarlo en cualquier otro lado. “Me gustaría hablar con el intendente y saber por qué no se puede rehacerlo en ese lugar, supongo que tiene que haber una razón”, destacó Castellucci.
Fuente: Agencia UNO
