El jefe de Gabinete bonaerense, Alberto Pérez, adelantó que no llevarán a la Justicia a los sindicalistas. Roberto Baradel, del SUTEBA, había acusado al sciolismo de «criminalizar» su actividad.
Después de varios idas y vueltas, el gobierno de la provincia de Buenos Aires decidió que no denunciará penalmente a los líderes de la protesta docente, Roberto Baradel y Mirta Petrocini. Así lo adelantó hoy, a través de su cuenta de Twitter, el jefe de Gabinete de Daniel Scioli, Alberto Pérez.
«En el día de hoy me he comunicado con el diputado Guido Lorenzino y otros legisladores de nuestro espacio para solicitarles que se abstengan de presentar la denuncia penal que estaban elaborando contra Baradel y Petrocini«, afirmó Pérez.
El funcionario sciolista explicó que entiende que «los motiva lo mismo que a nosotros, ver a los 4,5 millones de alumnos de la provincia en clases y que no se perjudique a las familias de Buenos Aires», pero prefirió no tensar aún más la frágil negociación con los docentes y apostar al diálogo.
«La actitud de algunos dirigentes es irresponsable e intransigente. Pese a eso, vamos a seguir apostando a la reflexión de éstos gremialistas«, dijo Pérez.
Esta mañana, Roberto Baradel, titular del SUTEBA, respondió a las versiones de una posible denuncia penal en su contra y acusó al sciolismo de querer «criminalizar la actividad sindical», algo que calificó como «propio de gobiernos autoritarios, no democráticos».
La denuncia contra Baradel y Petrocini iba a ser presentada en martes por el legislador Lorenzino, quien había adelantado que pediría que se los impute por «coacción y extorsión en la Justicia Penal de la Provincia» debido al paro docente. Sin embargo, por ahora, esa idea se desestimó por órdenes de Pérez.