Docentes, alumnos y familiares del Instituto Superior de Formación Docente y Técnica (ISFDT) Nº 103 de Fiorito, se movilizaron este martes junto a vecinos desde la sede de la institución a la intersección de Recondo y la autopista Presidente Juan Domingo Perón, donde interrumpieron brevemente el tránsito sentido a Capital Federalpara visibilizar sus reclamos contra la trata luego de tres episodios de secuestro que sufrieron mujeres que asisten al establecimiento. La presidenta del Centro de Estudiantes, Gabriela Capurro, confesó que se sienten “carne de cañón” y por eso piden un “tratamiento especial” por parte del municipio para combatir ese flagelo.
Al canto de “en nuestra escuela, no pasarán: si se las llevan, qué quilombo se va a armar”, decenas de integrantes de la comunidad educativa del ISFDT Nº 103 de Fiorito y vecinos realizaron breves interrupciones al tránsito que circuló en la ex Camino Negro y su colectora sentido a Capital Federal, a la altura de Recondo, con el objetivo de visibilizar el reclamo y la preocupación que nació luego de tres intentos de secuestro en distintos horarios de docentes y alumnas.
Gabriela Capurro, presidenta del Centro Estudiantes del Instituto ubicado en Campana al 1200, Fiorito, relató que en el primer episodio “dos maestras salieron corriendo una tarde y la denuncia quedó ahí”, pero luego “a una compañera de la noche la intentaron meter en un auto” y el jueves pasado “a una chica la quisieron meter en una Kangoo”, por lo que decidieron exponer la problemática en la que se encuentran inmersas las mujeres del barrio.
“El alerta lo ponemos cuando encontraron a Nadia Rojas en la Salada”, sostuvo al tiempo que reflejó la existencia de “cierta resistencia a tomarlo como trata –de parte de las fuerzas de seguridad– y por eso creemos que evidentemente están queriendo meterse” y aseveró que “también hay denuncias por el Campo Tongui”, donde se habrían sucedido episodios de similares características.
“Estamos en el medio de una situación complicada las mujeres que venimos acá. Encima somos casi el 90% las mujeres que cursamos, muy jóvenes algunas, y creemos que somos carne de cañón, por eso pedimos un tratamiento especial”, explicó en tanto a este portal.
Capurro también indicó que en el barrio “hay más casos pero no los denuncian” y por ese motivo Capurro comentó que “la justicia no los toma como válidos”. Asimismo prometió que seguirán adelante con las causas que involucran a la comunidad educativa del ISFDT 103 para que las investigaciones hallen relación entre los mismos.
Por otra parte trazó un paralelo con el secuestro de Bryanna Reganzani y señaló que cuando “apuntás con nombre y apellido, las cosas se resuelven diferente”, en referencia al padre de la joven de Villa Madero que estuvo cautiva en Ciudad Oculta; pero sostuvo que “no se está apuntando a nadie porque no se lamenta la muerte o desaparición de alguien, pero si ocurre ya saben a quienes se va a hacer responsables”.
“Sospechamos lo peor. La trata es algo que excede a un municipio incluso y por eso es como que estamos nosotros versus un monstruo. Vamos a intentar crear algún tipo de seguridad para que por lo menos sepan que acá vamos a estar nosotros ahí para controlar”, reveló la presidenta del Centro de Estudiantes de la institución.
En ese sentido, adelantó que próximamente conformarán una mesa donde “vecinos, docentes y estudiantes estén en alerta” para que el municipio “cumpla con lo que dijo en cuanto a poner más patrulleros, más luces y modificar el recorrido de los colectivos para que esté todo más cerca”, al tiempo que los propios habitantes de Fiorito “controlen la entrada de vehículos extraños” para alertarse entre sí generando “una especie de organismo que controle el barrio”.
