La vicejefa de Gobierno María Eugenia Vidal aseguró que la Ciudad «va a fondo contra el funcionamiento de los prostíbulos. No vamos a parar en la lucha contra la trata».
El Gobierno de la Ciudad clausuró y anuló de manera definitiva la habilitación de un local, ubicado en el barrio porteño de Flores, en el que se facilitaba el ejercicio de la prostitución.
Sobre la clausura efectuada por la Agencia Gubernamental de Control (AGC), la vicejefa de Gobierno, María Eugenia Vidal, reiteró su compromiso en la lucha contra la trata de personas. «Vamos a ir a fondo contra el funcionamiento de los prostíbulos. No vamos a parar en la lucha contra la trata», aseguró.
El local, situado en Varela 64, ya había sido clausurado en tres oportunidades por la Agencia Gubernamental de Control por irregularidades. Habilitado como bar, el lugar servía para contratar ilegalmente un «servicio de alternadoras». En reiteradas oportunidades, los agentes constataron que el local era el lugar donde se realizaban los contactos con los clientes para el posterior ejercicio de la prostitución en un edificio contiguo.
Por «desvirtuación de rubro», la AGC procedió a revocar la habilitación comercial de manera definitiva. Además, clausuró el local por incumplir las normas vigentes relativas a la habilitación, higiene, salubridad y seguridad.
El director ejecutivo de la AGC, Juan José Gómez Centurión, explicó que «las habilitaciones comerciales constituyen un derecho que se otorga para ser ejercido legítimamente. Por eso, una revocación como ésta fortalece el sistema de habilitaciones comerciales de la Ciudad, al establecer reglas claras para el uso legítimo de cada actividad comercial, y mejorar en tal forma la prevención y el control».
En los últimos años la AGC, con la colaboración de la Policía Metropolitana y la Subsecretaría de Derechos Humanos y Pluralismo Cultural, clausuró más de 100 locales relacionados al ejercicio ilegal de la prostitución en la Ciudad de Buenos Aires.
