El Diario Popular, publica en su edición impresa, una triste realidad que les toca padecer a los vecinos en este caso del partido de Florencio Varela, algo no muy distinto de lo que se vive en los demás partidos bonaerenses, como por ejemplo venimos denunciando ocurre en algunos barrios de Avellaneda.
La inseguridad se apoderó de las calles del barrio Villa Mónica Vieja, de Florencio Varela, donde numerosos vecinos ponen a la venta sus casas para mudarse a zonas más tranquilas, ya que «la ola delictiva no da respiro».
La pionera en esta lamentable tendencia fue una familia que vivía en la calle Tokio 583. Allí, delincuentes envenenaron a una perra rottweiler y -luego- drogaron y golpearon a una mujer recién operada para desvalijar la casa. Este hecho -que se registró el pasado mes de enero- fue el detonante para que el matrimonio y sus dos hijos pongan a la venta la propiedad y emigren hacia la provincia de Salta, donde actualmente residen.
De acuerdo a la explicación de los propios habitantes del vecindario, muchas familias están imitando este accionar para ponerse a salvo. «Acá en la esquina tenés una casa en venta; a la vuelta hay otra. Si caminás un poco vas a ver los carteles de las inmobiliarias en los frentes. La gente ya no quiere vivir más así. En mi caso, si pudiera irme para estar mejor lo haría», manifestó -en diálogo con El Quilmeño- Héctor Alvarez, un jubilado que vive en Alemania y Tokio.
Asimismo, el hombre relató que «a la vecina del frente de mi casa la reventaron a palos para robarle». «Se bajó del colectivo sobre la avenida (Eva Perón) y, cuando volvía a su casa, la agarraron unos pibes y la mataron a golpes para sacarle el celular y la cartera. Estuvo una semana internada por la golpiza», remarcó, al tiempo que sostuvo: «A los chicos de la Escuela Nº 3 los atacan para robarles las zapatillas, las camperas y los celulares».
No está exento de esta situación el almacén y granja del barrio que está en la calle Tokio al 400. Al ser consultada por este medio, la propietaria del comercio denunció que, en los últimos dos años, fueron asaltados cuatro veces; motivo por el cual tuvieron que poner rejas en todo el local. «Este año nos intentaron robar otras dos oportunidades, pero los vecinos fueron los que se dieron cuenta de la situación y nos salvaron. Eran cuatro adolescentes armados», describió María Cristina, quien después de las 18 atiende al público por una diminuta ventana.
Abandono
La falta de luminarias públicas y pavimentos agrava la situación de inseguridad en el barrio Villa Mónica Vieja de Florencio Varela. Las calles Tokio, Alemania, Inglaterra y Copenhague, así como la Avenida Eva Perón -a la altura del Camping de Camioneros- se encuentran totalmente en el abandono. Allí, en medio de la oscuridad, los delincuentes se ocultan y atacan a mujeres y trabajadores para robarles.