Dos salideras bancarias en los barrios de Chacarita y Paternal vecinos denuncian a la policía

Las sospechas de una “zona liberada” y la sensación de impotencia se apoderaron de la víctima, que aún le cuesta creer la situación por la que tuvo que atravesar.

Un empleado de un laboratorio fue víctima de una salidera bancaria en el barrio porteño de Chacarita y pese a ofrecer resistencia, intentando escapar de los cuatro delincuentes, fue despojado de una suma de 3.000 dólares y 2.000 pesos que había retirado de una sucursal de la zona de La Paternal para iniciar las vacaciones, junto a su familia.
El hecho, según trascendió, ocurrió el jueves pasado, en horas del mediodía, cuando el hombre, de 62 años, concurrió al Banco Francés de la avenida San Martín al 2300 para efectuar la extracción de su cuenta personal y una vez concretado el trámite, subió a su auto para volver a su lugar de trabajo, en la calle Coronel Susini al 2200, en inmediaciones del cementerio de Chacarita.
Apenas descendió de su Volkswagen Pointer, la víctima fue interceptado por un sujeto, que se movilizaba en una moto Honda de alta cilindrada y color rojo y le exigió a punta de pistola que le entregara el dinero. Frente a una primer negativa, el malviviente le dijo “dame la plata que sacaste del banco”, en un claro síntoma de conocer los movimientos que había efectuado el damnificado.
“En un acto reflejo, salí corriendo y me metí en un taller mecánico, que está enfrente del laboratorio. Había cuatro muchachos trabajando y en mi desesperación, tiré el sobre con los dólares y los pesos adentro del motor de un auto. Entonces, al delincuente que me había querido robar se le sumaron otros tres, que entraron a los gritos y con armas de fuego, buscando la plata y amenazando a todos.
Cuando la encontraron, escaparon en un Renault Megane de color bordó”, contó el hombre, en declaraciones a este diario.
Demora y sospechas
La denuncia del episodio delictivo fue radicada en la comisaría 29ª, con jurisdicción en la zona, pero “no pasó nada, ni siquiera le tomaron declaración a las más de diez personas que vieron todo, tanto a mis compañeros de trabajo, como a la gente del taller mecánico. Pedí hablar personalmente con el comisario, pero no pudo atenderme”, enfatizó la víctima de la salidera bancaria.
Según el propio damnificado, “mientras el primero de los chorros me estaba apuntando, mis compañeros vieron todo desde el primer piso de la oficina y llamaron al 911. Después que me metí en el taller y aparecieron los cómplices hasta que encontraron la plata pasaron varios minutos, pero el patrullero nunca apareció. Una hora y diez minutos más tarde, vino un móvil de la comisaría 29ª, cuando los ladrones habían escapado por la calle Martínez Rosas rumbo a la avenida Juan B. Justo, sin que se los detuviera”.
Las sospechas de una “zona liberada” y la sensación de impotencia se apoderaron de este hombre, que aún le cuesta creer la situación por la que tuvo que atravesar. “Sé que cometí una locura, al salir corriendo, pero fue algo instintivo. Era la plata para irme de vacaciones con mi familia, que retiré del banco a las 13.13, cuando en la sucursal no había casi nadie. Salí, camine una cuadra hasta donde dejé estacionado el auto y noté que la consigna policial no estaba, pero no advertí que me siguieran. Después pasó todo y la Policía demoró mucho en aparecer, cuando el hecho ocurrió a las 13.30, en pleno mediodía”, concluyó.

Fuente: Diario Popular

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *