Se hacían pasar por hombres de la ley. Realizaban operativos falsos en la calle y cometían todo tipo de delitos. Usaban vehículos con balizas y ropas similares a las que usan los efectivos.
Nueve integrantes de una misma familia, que se hacían pasar por policías y montaban operativos falsos en la calle, fueron detenidos por personal de la Policía Federal, acusados de cometer distintos asaltos en la Capital y el Gran Buenos Aires, muchos de ellos con la modalidad de «piratas del asfalto».
Según señalaron las autoridades policiales que participaron de los operativos en los que fue desbaratada la banda, los delincuentes actuaban como una «verdadera pyme», en la cual «cada uno tenía un rol determinado», utilizando vehículos con balizas policiales y ropas similares a las que usan los efectivos.
Además de las detenciones, los investigadores secuestraron en poder de los integrantes de la banda una importante cantidad de armas cortas y largas, chalecos antibalas, teléfonos celulares robados, municiones, escudos policiales, credenciales falsas y precintos plásticos.
La organización fue desarticulada en el marco de diez allanamientos simultáneos, realizados por personal de la División Investigación Técnica del Delito de la Superintendencia de Investigaciones Federales y dispuestos por el Juzgado Nacional de Instrucción número 49, de acuerdo con lo informado.
Según señalaron fuentes policiales a Noticias Argentinas, los delincuentes «armaban falsos operativos en plena calle para poder cometer delitos, tanto en la Capital Federal como en el Gran Buenos Aires».
Los efectivos policiales, al mando del comisario Néstor Roncaglia, detuvieron a los nueve acusados -cuatro mujeres y cinco hombres-, todos mayores de edad, en los allanamientos realizados en los barrios porteños de La Paternal, Mataderos y Lugano.
Allí se incautaron armas de grueso calibre, municiones, aparatos de comunicaciones, celulares, precintos, uniformes policiales, chalecos antibalas, varios autos con balizas y otros elementos de interés para la causa.
