Según familiares de las víctimas, el ex Comisario Inspector Franchiotti fue trasladado al penal de Baradero, con un régimen de reinserción social destinado a quienes cumplen la última etapa de su condena. El martes 26 se cumple una década de los asesinatos de Kosteki y Santillán.

Vanina  Kosteki, hermana de Maximiliano, asesinado hace casi diez años junto a Darío  Santillán en la denominada «Masacre de Avellaneda», aseveró hoy que el ex policía Alfredo Fanchiotti, condenado por los crímenes, fue trasladado a un penal que posee un régimen de detención abierto.

Según denunció el  portal Plazademayo.com desde el pasado jueves 14 de junio, el ex Comisario Inspector Alfredo Fanchiotti goza de un régimen carcelario abierto y de reinserción social, destinado a presos que estén cumpliendo la última etapa de su condena y que hayan demostrado buena conducta.

Franchiotti fue condenado a cadena perpetua por su participación en los asesinatos de Darío Santillán y Maximiliano Kosteki en la Masacre del Puente Pueyrredón o de Avellaneda, sucedida el 26 de junio de 2002, cuando durante el gobierno de Eduardo Duhalde se reprimió una movilización de grupos piqueteros.

El ex Comisario Inspector fue trasladado, a una semana del décimo aniversario de la represión que costó dos vidas y provocó centenares de heridos, con el traslado a la Unidad Penal número 11 de Baradero, a una cárcel de régimen abierto, última etapa que gozan ciertos reclusos antes de regresar a la libertad.

Según la denuncia, el beneficio fue otorgado por el Tribunal Nº 7 de Lomas de Zamora.

«La semana pasada me informaron que Fanchiotti iba a ser trasladado a (la prisión de) Baradero esta semana, que tiene un régimen abierto. Sin embargo, aceleraron esas fechas y fue trasladado el jueves por la noche para que nadie se enterara de ese ‘premio'», declaró Vanina Kosteki.

Fanchiotti y su colega Alejandro  Acosta fueron condenados en diciembre de 2005 a penas de prisión perpetua por los asesinatos de los militantes sociales durante una represión policial ejercida a una manifestación al pie del Puente Pueyrredón, en la localidad bonaerense de Avellaneda, en junio de 2002.

El traslado de Fanchiotti «fue realizado entre gallos y medianoche y en el mayor sigilo porque saben que es una medida que apunta a su libertad», comentó Claudia Ferrero, abogada de la familia Kosteki, en declaraciones al portal Plazademayo.com.

La letrada indicó que el paso del policía del penal de Olmos a Baradero significa «la última etapa antes de que un preso recupere su libertad». «Se les da permisos de doce horas de tal modo que sólo deben pernoctar en el penal. El objetivo es reintegrar a los reclusos a la sociedad. Pero no se puede hacer eso con Franchiotti, condenado a cadena perpetua y cuando no ha pasado diez años de reclusión», consideró Ferrero.

Esta no es la primera vez, que los tribunales de Lomas de Zamora, demuestran poseer buenas relaciones con policías corruptos de la bonaerense, y este tipo de medidas que no se dan a otros detenidos o procesados, demuestran que existen vínculos que se mantienen aún luego de la condena de funcionarios que deberían cumplir sus condenas en igualdad de condiciones. Algo que jamás Fanchiotti supo lo que es, ya que durante su detención siempre ha gozado de privilegios, incluso hubo denuncias anteriores de salidas no autorizadas desde los lugares de detención.

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