Creció el delito en Avellaneda, Lanús, Lomas y Quilmes

Finalizando el año 2017, los partidos de la zona sur, Avellaneda, Lanús, Lomas y Quilmes han registrado un significativo crecimiento de delitos, ya nos habíamos referido en otro momento de la cantidad de víctimas que tienen partidos como Lanús y Quilmes. Esa triste estadística ha sumado una nueva víctima, la Oficial de la Policía Local, Noelía Fernández, quien fue atropellada al intentar identficar a los ocupantes de un auto en Lanús.

A pesar de los videos y lo que muestra el municipio que conduce Grindetti, las cosas en materia de seguridad no se sienten en la calle donde está la verdad, los robos son cotidianos y violentos, más aún el tan nombrado y destacado SAME demoró en exceso según los testigos del criminal acto que tuvo como víctima a la joven policía local.

En Avellaneda por ejemplo los robos cometidos en la modalidad «motochorro» son una verdadera preocupación para los vecinos que son potenciales víctimas, a la falta de estrategias de trabajo en seguridad hay que sumar los delincuentes que reciben apoyo político y judicial, donde se dan casos de conocidos delincuentes con varias detenciones y causas que son liberados inmediatamente.

Quilmes a pesar de tener otro intendente de Cambiemos y un gran apoyo con recursos no ha mejorado en nada la seguridad de los vecinos, robos violentos, asesinatos entre los que se incluyen varios policías son una muestra de la gestión de Martiniano Molina.

Lomas de Zamora es tal vez el municipio más complejo en cuanto a inseguridad y delitos, con el territorio más amplio en comparación de los otros municipios de zona sur, tiene enquistada la corrupción desde hace años, el Departamento Judicial de Lomas de Zamora tiene un record triste al ser considerado una de los más corruptos, pero no solo las investigaciones  que no prosperan son las de la justicia de Lomas, causas federales por investigaciones en delitos de Trata de Personas han sido archivadas o no impulsadas por jueces federales como el mismo Ariel Lijo, que tiene una especial habilidad para manejarse con causas donde la política está involucrada. Parecería que un día se dieron cuenta que en Lomas de Zamora hay corrupción y que mejor que agrandar con ayuda de la prensa procedimientos donde los corruptos sean solo los policías, no señores, dejen de subestimarnos a los ciudadanos.

Los vecinos en los reclamos de mayor seguridad, suelen ignorar que lo que está fallando en el trabajo policial son las denominadas brigadas que deberían prevenir la venta de drogas o actuar en delitos complejos, actividades que no realizan eficientemente, así las ex DDI que deberían tener una alta tasa de trabajo solo realizan esporádicos allanamientos de poca relevancia y que no disminuyen el delito.

Tanto Ritondo como Vidal, no han aprendido nada en los dos años de gobierno, señalabamos que no entendían nada en materia de seguridad y hoy creen que con perseguir la corrupción policial mejorará la seguridad, pero mientras apuntan los recursos a una sola fuente no se percatan que el delito aumenta y que por otros lados hay quienes aprovechan ese desconocimiento, terminando la gobernadora envuelta en una interna policial que nunca deja buenos resultados.

La provincia de Buenos Aires, tiene serios problemas de inseguridad y que al no saber se han ido acentuando como es el caso también del partido de Tres de Febrero, si bien mencionamos a los partidos de la zona sur, el problema se replica en otros municipios.

Falta un compromiso serio de parte de la gobernadora para dar batalla a la inseguridad, siguen sin asesorarse correctamente, sigue teniendo dentro del gobierno a un personaje como Ritondo que no es una solución, sino más bien parte del problema, falta valor para terminar con las mafias políticas y sindicales que apañan delincuentes, falta avanzar en investigar a jueces y fiscales que son parte necesaria de la corrupción policial por acción u omisión.

Hoy solo se puede decir que la inseguridad hasta se robo la honestidad y el valor de los que juraron defender la Constitución.

 

Por Marcelo Ricardo Hawrylciw

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *