Cordera debe indemnizar a Cordero

CorderaEn un recital que la popular banda Bersuit brindó en 2003 en Mendoza, un joven terminó en coma producto de una avalancha. La Justicia juzgó negligencia en el club, la Municipalidad y el grupo musical por lo que entre las partes deberán ponerse con casi 2 millones de pesos.

La Justicia de Mendoza condenó a la Bersuit Vergarabat, al club Pacífico y a la Municipalidad de la capital provincial a indemnizar en $1.8 millones a la familia de un joven que fue internado en coma tras ser aplastado por una avalancha durante un recital que brindó el grupo en abril de 2003.

Las tres partes fueron condenadas en forma solidaria en un fallo publicado el viernes pasado y que fue emitido por los jueces de la la Corte de Mendoza Omar Palermo, Alejandro Pérez Hualde y Jorge Nanclares.

Según la información difundida, la indemnización para la familia del joven Pablo Cordero, que en el momento del hecho tenía 20 años, es de $1.282.000, aunque trepa a $1.800.000, al tener en cuenta la tasa de interés activo establecida por el Banco Nación.

El hecho se produjo el 12 de abril de 2003 cuando el club Pacífico, considerado el templo cuyano del rock, fue escenario de un show de la banda que permanecía en pleno auge.

Pablo Cordero, quien había viajado desde la ciudad de San Rafael para asistir al show fue aplastado por una avalancha que se produjo luego del recital. El joven sufrió graves traumatismos y paro respiratorio, cuadro que determinó que fuera internado en estado de coma.

En un primer fallo, la Cuarta Cámara de apelaciones en lo Civil, había señalado que la instalación de vallados provocó un «verdadero cuello de botella».

Además, no se proveyó ambulancias ni servicio de emergencia médica, por lo que el joven Cordero «tuvo que ser llevado al hospital en un móvil policial y no se le pudo practicar medicina de emergencia en el lugar por inexistencia del servicio«, sostuvieron los camaristas.

También se consideró que durante el recital «no se proveyeron medidas de aireación ni ventilación mínimas, no se proveyeron salidas adecuadas, no se proveyeron puertas batientes con apertura hacia el exterior; no se respetaron las medidas mínimas de las aberturas de egreso, falencias todas imputables al organizador del evento».

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