Sucedió en la localidad bonaerense de Benito Juárez. Los policías detuvieron a la agresora, que le efectuó al hombre un disparo, con una carabina, mientras la víctima descansaba en su cama.
Una hombre de 58 años fue salvajemente asesinado por su esposa, quien le disparó un tiro en el cuello mediante una carabina, mientras el sujeto descansaba en su cama, en un tremendo suceso que se registró en la localidad bonaerense de Benito Juárez. La mujer, que resultó detenida por los pesquisas policiales, intentó fingir que su marido había sido agredido por delincuentes.
Los voceros revelaron que la infortunada víctima fue identificada como Mario Rubén Madrid, de 58 años.
Trascendió que el hecho se produjo entre la noche del 6 y la madrugada del 7 de este mes cuando el cadáver de Madrid fue hallado en la parte trasera de la finca que habitaba, en el establecimiento rural Palo Verde, situado en el paraje Tedín Uriburu, en el denominado Cuartel VI.
Segúb manifestaron los informantes, el sujeto presentaba una herida de arma de fuego en el cuello y, junto al occiso, había una carabina 22 largo.
En aquellos momentos, la esposa del fallecido –Nélida Beatriz Burgos, de 53 años- les narró a los servidores públicos que su marido había escuchado ruidos, procedentes del exterior de la vivienda y, que al salir para ver lo que ocurría, munido de esa arma, recibió el disparo que le provocó la muerte.
Por este motivo, en un comienzo, los policías creyeron que Madrid había sido atacado por ladrones.
Sin embargo, las pericias realizadas con luminol en el interior de la vivienda en la que Madrid residía con su pareja establecieron que había restos de sangre en una de las paredes y en un colchón. Gracias a estos datos, los pesquisas policiales de la Coordinación Departamental de Investigaciones de Azul lograron establecer la verdad, ya que el individuo había sido atacado por su mujer, quien le efectuó un tiro en el cuello mediante la carabina, que colocó a escasos metros del cuerpo de su marido.
Finalmente la agresora lavó esa pared y el colchón en el que descansaba la víctima, a la vez que quemó, en una salamandra, una almohada, que tenía diferentes restos de tejido hemático, y arrastró el cadáver hasta la parte exterior del inmueble
Burgos fue detenida por las autoridades policiales.
Intervinieron en la causa, que fue caratulada «Homicidio», la doctora Laura Andrea Marghetich, fiscal de la Unidad Funcional N° 2, y la magistrada de Garantías, Mariana Iriani, ambas pertenecientes al departamento judicial de Azul.
