En una controvertida y extensa sesión ordinaria, el Concejo Deliberante de Avellaneda aprobó por amplia mayoría la Rendición de Cuentas correspondiente al ejercicio del 2009. Además, el Cuerpo dio el visto bueno a dos iniciativas en las que se pide que el intendente, Jorge Ferraresi, informe acerca de un posible desvío de alimentos destinados a planes sociales, aunque el oficialismo logró frenar un pedido del Acuerdo Cívico y Social para que el Jefe Comunal baje a dar explicaciones al recinto.
La aprobación de las cuentas llegó con un amplio respaldo del Cuerpo. Se manifestaron a favor el oficialista bloque del Frente para la Victoria- Partido Justicialista, Unión PRO y el Frente para la Victoria. En tanto, se inclinaron por la negativa el interbloque del Acuerdo Cívico y Social y Unión Celeste y Blanco.
En ese marco, uno de los concejales más críticos fue Rubén Conde, del GEN, que indicó que los gastos presupuestados para 2009 y que fueron analizados ayer, “fueron previstos para un país diferente, con otras variables y no con una inflación al 15 por ciento, con otra situación fiscal y con un dólar a 3,90 pesos”.
Además, cuestionó “las prioridades que tuvo el Gobierno” y cómo gastó en función de esas prioridades, al tiempo que criticó que el reparto que se hizo del presupuesto de acuerdo a las distintas áreas de trabajo.
“Seguridad y Medio ambiente se llevaron el 0,5 por ciento de lo presupuestado”, se quejó.
También hizo hincapié en que los fondos con los que finalmente contó el Departamento Ejecutivo el año pasado superaron ampliamente los 315 millones de pesos estimados, ya que gracias a los aportes de Provincia y Nación, arañaron los 870 millones de pesos.
“Ojalá alguna vez podamos discutir una Rendición de Ferraresi y no del (ministro de Planificación nacional) Julio de Vido”, castigó.
En tanto, el edil de la Coalición Cívica- ARI Jorge Pineda aclaró que su espacio “ya votó en contra” del Presupuesto y que la Rendición “es el correlato” de ese estimado. Además, el radical Rodrigo Galetovich aseguró que la Rendición “técnicamente tiene muchas falencias” y remarcó que “hay faltantes graves”.
“No se cumple con la información, con los estados contables. También observamos algunas transferencias de fondos a cuentas de terceros que no están explicadas”, cargó.
Desde UCyB, José Alessi también se mostró cercano a estas definiciones y también cuestionó “cómo de distribuyó el gasto”.
Sin embargo, el oficialismo tuvo un aliado de fierro de la mano del PRO. Su presidente, Daniel García, atacó a los ediles del Acuerdo que formaron parte del gobierno de la Alianza a principios del milenio y les reprochó que “en su momento votaron una Rendición con un déficit del 30 por ciento y un Presupuesto mucho peor”.
“Ha llegado plata de afuera y se la ha destinado a la construcción de viviendas. Estamos convencidos de que la rendición es votable, no podemos oponernos a algo que está bien”, subrayó.
De todos modos, el oficialista Jorge Gamarra reconoció un déficit del 1,5 por ciento (unos seis millones de pesos), aunque aseguró que “la remodelación del Mercado de Frutos, la construcción de jardines maternales y la compra de bienes” redundan en “superávit”.
En resumen, la Rendición fue aprobada por 16 votos contra 8.
Por otro lado, la denuncia que se hizo pública esta semana por un supuesto desvió de mercadería destinada a planes sociales con fines comerciales en Villa Domínico levantó otra polémica entre la oposición y el oficialismo.
Sucede que el PJ habilitó la aprobación de dos pedidos de informes sobre el tema (uno presentado por el propio oficialismo y otro del macrismo), aunque frenó un pedido para que Ferraresi baje al recinto y aclare en persona la situación.
“Se hubiesen preocupado cuando eran gobierno y se negociaba con los alimentos de los compañeros. La Justicia aclarará el tema”, fue la respuesta del vicepresidente del PJ; Benicio Gutiérrez.
En tanto, también se aprobó (con el voto negativo de la UCR y la abstensión de UCyB) una comunicación en repudio a los dichos del senador radical Ernesto Sanz en los que aseguraba que debido a la implantación del plan de Asignación Universal por Hijo aumentó “el juego y la drogadicción”.
Por último, se aprobó un proyecto de ordenanza por el cual el Departamento Ejecutivo podrá “proteger” ciertas áreas durante las campañas electorales con lo cual, por ejemplo, los partidos políticos y agrupaciones quedarán impedidos de realizar las clásicas pegatinas de carteles.
La iniciativa fue aprobada por 14 votos (PJ y el PRO) contra 10 (ACyS, FpV y UCyB).
“No voy a acompañar algo que coarta la libertad de expresión. Quieren tener limpia la ciudad pero no todos tienen el dinero para pagar una marquesina”, apuntó Hernán Doval, del FpV.
Renunció el Secretario de Salud Oscar Fariña
Finalmente, el Secretario de Salud municipal, Oscar Fariña, renunció a su cargo el viernes por la tarde, luego de semanas de comentarios y versiones de peleas, gritos e insultos con el jefe comunal, algo que fue desmentido tantas veces como afirmado.
El renunciante en su escrito afirma que lo hace por motivos personales, y ante las acusaciones de la oposición a la gestión oficial, estos afirman que siempre se acompaño la gestión del saliente médico, y que el intendente siempre concurrió a los actos que desde la Secretaría de Salud se realizaron, pero que las ambiciones políticas de Fariña en pelear la intendencia hizo insostenible su continuidad.
Desde la oposición y del PJ disidente lamentaron la renuncia de Fariña y no ahorraron críticas al intendente, por un lado el consejal Benicio Gutiérrez «Pantera» lamentó la salida del funcionario a quien siempre defendió, por el otro lado, el consejal del PRO Daniel García, volvió a criticar con dureza la gestión de Ferraresi con una frase, «sabemos que el doctor Fariña en su cargo representaba a ella, a la excelencia, Y no, como lo he dicho del Sr. Yacoy, todo lo contrario sino la decadencia».
