A 15 años de la muerte de Gilda, el mito crece

Un 7 de septiembre de 1996, en un trágico accidente en el Km. 129 de la ruta 12 en Entre Ríos, falleció uno de los grandes exponentes de la música tropical, Miriam Alejandra Bianchi, conocida popularmente como Gilda.

Nacida el 11 de octubre de 1961 en el barrio de Devoto de la Capital Federal, su padre se enfermó gravemente cuando ella tenía apenas 10 años y la familia tuvo que pasar graves penurias económicas.

A los 18 años, Gilda se casó y tuvo dos hijos. Aunque soñó con ser pediatra, el destino la llevó a destacarse en los actos escolares del establecimiento donde se desempeñaba como maestra jardinera.

Alguien de la movida tropical la descubrió cuando actuaba en ese ámbito y le propuso grabar algunas canciones. Allí comenzaba a nacer una estrella.

Gilda falleció un 7 de septiembre de 1996 cuando estaba en el mejor momento de su carrera, ya antes de su muerte convocaba a multitudes que la veneraban por supuestos poderes sanadores. Tras su muerte, el mito se hizo leyenda.

A cien metros del lugar del accidente que ocasionó la tragedia, se encuentra el «Santuario de los Milagros de Gilda». Allí también murieron su madre y una hija además de sus músicos.

En la actualidad, todos los años miles de fanáticos recorren el lugar del accidente y se congregan a rezar y a pedir por su alma.

Sus discos se editaron en México, Paraguay, Chile, Perú, Bolivia, Ecuador, Uruguay. Obtuvo discos de oro, de platino y doble platino. Ya fallecida, fue nominada para la entrega de los premios Carlos Gardel. Ganó en la categoría mejor artistas tropical femenina.

El sueño de su madre era ponerle Gilda en homenaje al personaje de Rita Hayworth en la famosa película, pero no fue posible. Sin embargo, todos la llamaban así en en el hogar y luego terminó siendo su nombre artístico.



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